Las plantillas pueden ayudar potencialmente a corregir la supinación, según la gravedad de la afección. La supinación ocurre cuando el pie rueda hacia afuera durante el movimiento, lo que puede ejercer una presión adicional sobre el tobillo y otras partes del pie. Las plantillas diseñadas para corregir la supinación, también conocida como subpronación, suelen tener características como mayor amortiguación y soporte a lo largo del borde exterior del pie para fomentar una alineación más neutral durante el movimiento.

Sin embargo, es importante tener en cuenta que las plantillas por sí solas pueden no ser suficientes para corregir por completo la supinación, especialmente si se trata de una afección grave o crónica. Puede ser necesario combinar el uso de plantillas con ejercicios para fortalecer y estirar los músculos y ligamentos alrededor del pie y el tobillo. Se recomienda consultar con un profesional de la salud, como un podólogo, para obtener un diagnóstico y un plan de tratamiento precisos.